El Tribunal Superior de Bogotá definió este lunes 4 de marzo la “libertad a prueba” para el excomandante paramilitar, Salvatore Mancuso, excabecilla de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC), que llegó extraditado desde los Estados Unidos.
Luego de ser condenado en el país norteamericano en 2015 a 15 años y 10 meses de prisión por narcotráfico, Mancuso regresó a Colombia el pasado 27 de febrero.
Un juez convalidó en 2020 parte de la condena que cumplió mientras permaneció preso en Colombia desde 2006.
“Al encontrarse satisfechos los dos únicos presupuestos, se le concede al postulado condenado Salvatore Mancuso Gómez la libertad a prueba por un periodo de cuatro años”, indicó Luz Marina Zamora Buitrago, jueza de ejecución de penas de Justicia y Paz del Tribunal Superior de Bogotá
Mancuso aceptó participar en el programa de la Paz Total del Gobierno promovido por el presidente de Colombia, Gustavo Petro, como un gestor de paz.
La susodicha libertad a prueba presenta dos condiciones: no podrá salir del territorio nacional, ni tampoco podrá vivir en los departamentos de la Costa Atlántica, en donde cometió los delitos mientras perteneció a las AUC.
Sin embargo, el exparamilitar continuará retenido en el Complejo Carcelario y Penitenciario Metropolitano de Bogotá, conocido como “La Picota”, hasta que el Tribunal de Barranquilla, en donde cursan 33 medidas de aseguramiento, avale la petición de ser gestor de paz.
“Tengo un compromiso con el presidente Petro de ayudar en los diálogos y las negociaciones de desmovilización de los actores que se rearmaron con posterioridad al desarme de las Autodefensas”, señaló Mancuso en una carta dirigida al mandatario y publicada el día de su llegada a Colombia.
El exjefe de las AUC dejó la lucha armada en 2006, cuando se acogió al sistema de Justicia y Paz, creado en 2005 bajo la presidencia Álvaro Uribe.
Durante su etapa al frente de las Autodefensas, reconoció su participación en, al menos, 300 asesinatos, y en 87 actos criminales, incluidas diversas masacres como la del Aro (15 muertos), El Salado (100 muertos), y Mapiripán (49 muertos).