Beryl, ya debilitado a tormenta tropical, continúa su paso por Texas, Estados Unidos, donde ya hay cuatro muertos a causa de las fuertes precipitaciones. Mientras, los vientos huracanados causaron un apagón que afectó a más de dos millones de habitantes.
De acuerdo con CNN, hay 121 condados texanos con declaración de desastre. El Centro Nacional de Huracanes pronostica que avance por el este hacia el valle del Mississippi, seguirá avanzando hacia el centro del país y la zona de los Grandes Lagos.
Se espera que la tormenta continúe debilitándose, pero aún así las autoridades alertan sobre posibles inundaciones en todo el estado y sobre las costas.
En el área de Houston reportaron esta tarde un total de cuatro muertos, incluyendo un trabajador de la Policía local. Este último fue identificado como Russell Richardson, de 54 años de edad, quien murió después de quedar atrapado en un su automóvil en medio de una inundación.
El alcalde John Whitmire informó en una conferencia de prensa que el trabajador civil había sido llamado como parte del grupo de empleados a los que se les pidió ayudar con los esfuerzos de respuesta ante la tormenta. Quedó atrapado en las inundaciones mientras conducía a su lugar de trabajo.
“Los socorristas finalmente sacaron su cuerpo de un vehículo en Houston Avenue debajo de la Interestatal 45”, dijo.
Richardson trabajó en la oficina de servicios tecnológicos del departamento de policía como “oficial de seguridad de la información”, indicó Satterwhite en X hoy.
El vicegobernador del estado, Dan Patrick, aseguró también en una rueda de prensa que, en todo el estado, más de 2,7 millones de personas están sin electricidad e indicó que tomará “varios días” restaurar el servicio.
