El regreso de la conectividad aérea de Venezuela ha generado mucho optimismo en los representantes de las distintas organizaciones y empresas internacionales. Varias aerolíneas consideran que es un mercado muy atractivo para aumentar sus operaciones dada la migración venezolana y otras prefieren esperar cómo se desarrollan los acontecimientos para ingresar nuevamente al país. Mientras, los gremios que agrupan la industria mundial afirman que es prioritario solventar los temas pendientes para que se abran completamente los cielos venezolanos.
Recientemente se llevó a cabo la Asamblea Anual de la Asociación Latinoamericana y del Caribe de Transporte Aéreo (ALTA) en Cancún, México, en la cual se dieron cita 400 líderes de la industria de la aviación, entre ellos 40 presidentes de aerolíneas internacionales. Durante el evento se debatieron los retos del sector y cómo prepararse para un futuro sostenible de este tipo de transporte. Venezuela no pasó desapercibida, en las consultas de TalCual a varios CEO de líneas aéreas sobre sus perspectivas en el país, aseguraron que tiene una amplia capacidad de crecimiento.
El director ejecutivo y CEO de ALTA, José Ricardo Botelho, sostuvo que el potencial turístico y la migración significativa de venezolanos, son dos factores que hacen que Venezuela sea un mercado atractivo para la llegada de más líneas aéreas al país. Resaltó que a medida que se permitan más operaciones, esto generará una afluencia importante de pasajeros que deben ser atendidos.
«Sí hay potencial. Es importante que el país siga este camino de buscar a las grandes líneas internacionales, medianas o pequeñas, para que de manera uniforme se pueda atender la demanda, porque la demanda va a llegar», afirmó.
Sostuvo Botelho que la mejor manera de llegar a nuevos acuerdos para desarrollar el sector aéreo venezolano es «charlar, hablar», estar abierto a propuestas y poner en la mesa todas las ideas. «Todos los países que buscaron esta industria para hacerlo un medio de transporte esencial y que comprendieron esta premisa, cambiaron de manera positiva en beneficio para su población. Ecuador, por ejemplo, hizo un trabajo tremendo en este sentido; Brasil tuvo un proceso similar y pasó de 30 millones de personas en tránsito a 100 millones de personas. Además, esto generó empleos, mejoró la infraestructura y la tecnología, tuvo una repercusión positiva en el turismo».
Hasta la fecha, varias aerolíneas internacionales del estrato medio han estado más interesadas en ingresar al mercado venezolano, mientras que las grandes empresas aún mantienen cierta cautela y a la espera de los acontecimientos en el país; pero además, atentas a las regulaciones. Para Botelho, es prioritario garantizar seguridad jurídica y transparencia en los procedimientos, «y Venezuela tiene 30 millones de habitantes, es un tremendo mercado, por lo que hay que garantizar las inversiones directas e indirectas, blindar las alianzas, contar con la infraestructura necesaria».
Por su parte, Willie Walsh, director general de la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA, por sus siglas en inglés), destacó que observan con muchas expectativas al país, dado el regreso de varias líneas aéreas y luego de evidenciarse que los aeropuertos venezolanos funcionan dentro de los mandatos y estándares de seguridad internacionales.
«Anteriormente Venezuela era un mercado fantástico, era un mercado muy importante, pero después ocurrieron varios problemas como la imposibilidad de repatriar los fondos. Esto trajo como consecuencia que muchas empresas no pudieran seguir operando y muchas se fueron. Ahora, tras conversaciones constructivas con el gobierno venezolano, hemos visto que hay más compañías que han regresado y sabemos que con los nuevos métodos de pago ha habido mejoras con la disponibilidad de los fondos o ganancias», dijo.
Estos recursos represados suman 3.500 millones de dólares que las aerolíneas extranjeras no han podido enviar a sus empresas filiales desde el estricto control de cambio que se instauró en Venezuela entre 2003 y 2018. Aunque este ha sido un tema de discusión recurrente entre la IATA y las autoridades venezolanas, no se ha podido llegar a un acuerdo.
Walsh espera y ha solicitado a las autoridades venezolanas que «algún día» se pueda resolver el tema de los recursos que las aerolíneas no han podido repatriar hacia sus casas matrices en el exterior. «Vamos a estar atentos de cómo se desarrolla el mercado venezolano».
Willie Walsh, director general de la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA), en rueda de prensa durante la asamblea de ALTA en Cancún, México.
Las expectativas son muchas sobre el mercado aéreo local y los planes de crecimiento están alineados a las decisiones de las autoridades locales. El prinicipio de reciprocidad es un factor en el que se debe estar pendiente, así como la meta de expansión regional de las aerolíneas y de cómo insertan a Venezuela en sus planes:
Copa Airlines
Pedro Heilbron, CEO de Copa Airlines, indicó que aunque la empresa no ha dejado de operar en Venezuela, han sido flexibles y han tenido que adaptarse a las circunstancias. «En algunos momentos hemos tenido que ajustar la capacidad de los vuelos dependiendo de la situación y hemos tenido momentos en los que hemos reducido esa capacidad, también hemos podido agregar más vuelos. Ahora mismo la economía está bastante dolarizada y hemos vuelto a vender en esa moneda, lo cual es una ventaja».
Copa se mantuvo operando en el país a pesar de la crisis económica venezolana, durante las sanciones de Estados Unidos y cuando se suspendieron los vuelos en el mundo por la pandemia del covid-19. A comienzos de 2021 la compañía panameña reactivó los vuelos entre Caracas y Panamá, y sirvió como puente para que los venezolanos pudieran llegar a otros destinos. Hoy, cuenta con 38 vuelos semanales y planifican sumar otras ocho para este año.
Heilbron reiteró que la tarea en Venezuela ha sido «adaptarse» y «flexibilizar» el plan de operaciones de acuerdo a las circunstancias. Indicó que la dolarización y las alternativas de pago internacionales contribuyeron a la venta de los boletos en una moneda distinta al bolívar.
«Copa nunca ha dejado de operar desde que inició en el país hace muchos años y con las crisis recientes, los diferentes problemas que han habido con su moneda y demás, nos hemos mantenido operando. Sí hemos hablado mucho de ser flexibles, hemos ajustado la capacidad de más o menos vuelos dependiendo de la situación. Ahora mismo la economía venezolana está bastante dolarizada y desde la crisis con el bolívar al final de 2014, ninguna de las aerolíneas volvimos a vender en moneda local, y podemos vender en dólares a quien tenga una tarjeta de crédito internacional».
Pedro Heilbron, CEO de Copa Airlines, en la asamblea anual de la Asociación Latinoamericana y del Caribe de Transporte Aéreo (ALTA).
Iberia
Mariana Colunga, directora de Iberia en Latinoamérica, tiene la firme misión, según sus propias palabras, de hacer crecer este año la presencia de la empresa en la región y en lo que va de 2023 ha sido «extremadamente positivo» para la estrategia de la compañía. Iberia tiene un plan de expansión puntual para América Latina para los próximos cinco años. «Después de haber salido de operar en un entorno tan complejo como la pandemia, en 2023 vamos a consolidar y estamos superando los niveles anteriores de la pandemia. No es secreto que en algunos países tenemos una mayor presencia, pero con la historia que Iberia lleva ya en la región de 67 años, la consideramos nuestro segundo hogar. Somos una línea europea con corazón latinoamericano».
Iberia vuela actualmente a 16 países de la región y a 18 ciudades. México ocupa en estos momentos el número uno con tres frecuencias diarias, seguido de Argentina y Colombia. «Sin embargo, no necesariamente estos países en la que tenemos una mayor contribución, son lo únicos que tiene relevancia para nuestra empresa. Tenemos planes de crecimiento en muchas otras naciones».
En Venezuela, la aerolínea española ofrece cinco frecuencias semanales entre Madrid y Caracas. En este sentido, cuenta con una oferta de 2.880 asientos semanales lo que significa un aumento de 60% en relación a la capacidad anterior. Iberia compite en este segmento con Air Europa y Plus Ultra Líneas Aéreas.
La relación de Iberia con Venezuela tiene muchos años y se ha mantenido a pesar de las circunstancias, afirma Colunga.
«Es un mercado que tiene particularidades, sin embargo, hemos actuado con relación a la ley de la oferta y la demanda y la decision de haber aumentado las frecuencias obedece a que existe una demanda que va y viene, tenemos un flujo de visitantes muy importante que sale de Europa hacia Latinoamérica y Venezuela es una de las rutas que más afluencia tiene, recordemos que hay un componente familiar y de migración».
Hasta ahora, la empresa no tiene contemplado solicitar nuevos destinos desde España hacia Venezuela o vicerversa (llegar a otras ciudades). «Y la razón es que queremos enfocarnos en fortalecer la ruta que ya tenemos. La realidad es que en Latinoamérica solo hay dos países a los que estamos llegando a varias ciudades: Brasil (Río de Janiero y Sao Paulo) y Ecuador (Guayaquil y Lima) y que son rutas que han existido desde hace muchos años. No descartamos que en un futuro podamos analizar nuevos destinos en Venezuela», señaló Colunga.
Wingo
Eduardo Lombana, CEO de Wingo, hizo un balance «muy positivo» sobre el regreso a Venezuela de esta aerolínea colombiana de bajo costo o low cost, por lo que los planes son incrementar rutas y frecuencias. «Arrancamos operaciones y todo apunta a que será útil comenzar a incrementar el número de frecuencias ahora que Satena (la estatal colombiana) decidió salir de la ruta, por lo que podemos servir esa ruta entre Bogotá y Caracas. Aspiramos poder atender otras ciudades de Venezuela, particularmente le hemos mencionado a las autoridades de ambos países para servir las rutas de Valencia y Maracaibo desde ciudades distintas a Bogotá. Creemos que Medellín y Barranquilla pueden beneficiarse de esa conectividad».
Actualmente Wingo cuenta con tres frecuencias semanales, pero esperan incrementarlas a siete. Por lo pronto deben adherirse a la hoja de ruta que han diseñado las autoridades de ambas naciones; y en eso están, trabajando con los organismos estatales para crecer a medida que se les permita.
«Sabemos que hay total disposición de ambas autoridades aeronáuticas para seguir creciendo, pero entendemos que son procesos que se irán ejecutando paulatinamente y somos respetuosos de ello. Fuimos los últimos operadores que trabajamos hasta antes de la pandemia y ahora estamos tratando de que la operación madure y posteriormente crezca», recalcó Lombana.
Luego de la reanudación comercial entre Colombia y Venezuela sostuvo que la actividad aérea entre ambos países seguirá creciendo. «Los gobiernos han optado porque sea gradual, pero ya hemos visto a estas alturas del partido que esto es irreversible. También observamos que el gobierno venezolano ha iniciado conversaciones más amplias de carácter económico con Estados Unidos y creemos creemos que eso pueda hacer que la economía venezolana crezca con mayor dinamismo. Nosotros queremos ayudar a que eso ocurra y nuestra aspiración es poder seguir atendiendo al mercado venezolano. Tenemos la convicción de que es un país en el que Wingo debe estar».
Eduardo Lombana, CEO de Wingo, hizo un balance «muy positivo» sobre el regreso a Venezuela de esta aerolínea colombiana.
Latam Airlines
El CEO de Latam Airlines, Roberto Alvo, coincidió en que la migración venezolana de unos 8 millones dará una oportunidad de incrementar la conectividad aérea del país. «Estos dos años de cierre van a pasar. No se qué va a pasar con Venezuela en sí, pero me parece que vamos a volver a operar todos un mercado que ha sido un gran ausente en la región, probablemente el único mercado grande que ha estado lejos en los últimos años».
Latam inició en 2022 su proceso ante las autoridades aeronáuticas para formalizar su solicitud de volar entre Bogotá y Caracas. A finales de junio, la aerolínea recibió la autorización para volar a Venezuela por parte del Instituto Nacional de Aeronáutica Civil (INAC). Ahora, aumenta sus operaciones a territorio venezolano con una nueva ruta entre la capital colombiana y el Aeropuerto Internacional de Maiquetía el cual se anunció el pasado martes 31 de octubre.
«En el caso de Latam operamos ahora desde Bogotá, estamos desde Lima y esperamos volver a darle la oportunidad a los venezolanos de volver a su país desde Chile y Perú, aunque sea a ver a la familia», dijo Alvo.
Aeroméxico
Andrés Conesa, CEO de la línea aérea mexicana, señaló que aún la empresa no está considerando volver a Venezuela, ya que el objetivo principal por ahora es su mercado más cercano: el norteamericano.
México recobró en septiembre pasado la Categoría 1 en seguridad aérea, lo que le dará la oportunidad a Aeroméxico de aumentar operaciones paulatinamente en 17 nuevas rutas con origen en siete aeropuertos mexicanos a diversos destinos estadounidenses a partir de enero de 2024. Planea entonces tener cerca de 60 frecuencias diarias hacia hacia 36 ciudades de Estados Unidos. Todos estos vuelos contarán con código compartido de la aerolínea Delta.
«Por lo pronto no (operar en Venezuela), ahora con el regreso de México a Categoría 1, nuestra principal fuente para los siguientes uno o dos años será Estados Unidos, seguramente quizás después de esta etapa probablemente pensemos en el mercado venezolano», apuntó Conesa.
Tal Cual
