El conductor de la camioneta Ranault Kangoo, quien se desplazaba en sentido contrario por la autopista Uno en Maracaibo y se estrelló de frente contra el Nissan Sentra, donde viajaban Adriana Mendoza (fallecida), su novio Luis y su cuñada Luciana (heridas), salió de la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI).
A cuatro días del fatal accidente, ocurrido la madrugada del lunes 1 de enero, el periódico en línea de investigación, El Pitazo publicó que el hombre de 32 años está recluido en una clínica y “su condición de salud es estable. Su problema es la fractura de cadera, probablemente amerite una prótesis fija. Está muy asustado”.
Además del portal web, también la cuenta en X de reportajes e información independiente @axioma.report; y la cuenta en IG @justiciaparaadriana, publicaron las fotos y el nombre del chofer de la camioneta gris: Guillermo Martínez.
Trascendió que desde que ocurrió el choque frontal, el conductor y propietario de la “Kangoo” fue internado en el centro médico privado, ubicado en Sabaneta, donde le realizaron una laparotomía y posteriormente fue intubado.
Desde el día del choque varias versiones se tejieron en redes sociales sobre si Martínez había salido ileso del impacto y que huyó del país, incluso que no estaba conduciendo la unidad. También se ventiló que es hijo accionista de una venta de pollos al mayor y detal de la urbanización La Coromoto.
Sin embargo, en videos publicados en canales de Telegram de minutos después de ocurrido el accidente y cuando usuarios de la C-1 auxiliaban a los heridos, se observó cómo por el puesto de copiloto Guillermo Martínez lograba salir a medio cuerpo de la camioneta y reposar su rostro ensangrentado en la carretera.
Incluso, en ese video se nota que Martínez, aparentemente, llevaba puesta la misma camisa manga larga con estampado de rayas azules, rojas y negras, con la que horas antes, aparentemente, había posado en su reunión familiar por el 31 de diciembre, esto según una foto publicada por la cuenta en X de @axioma.report.
La situación legal de Martínez hasta los momentos no está clara. Más allá del alcalde de Maracaibo Rafael Ramírez, que en un mensaje en su cuenta en X informó que los dos conductores de los carros implicados estaban hospitalizados y bajo custodia policial, ninguna otra autoridad se ha pronunciado.
Familiares de Adriana Mendoza, así como de los hermanos Luis y Luciana Chávez, exigen a los organismos correspondientes que se pronuncien por este caso y que se haga justicia ante la lamentable pérdida de una vida humana.
