Cristiano Ronaldo se ha visto envuelto en una surrealista situación. El portugués viajó en septiembre a Teherán, capital iraní, con su club para enfrentarse al Persépolis en la Liga de Campeones asiática.
Antes del partido, se reunió con la pintora iraní Fátima Hamami, gran fan suya, quien le regaló con cuadro con imágenes del luso celebrando un gol.
En este encuentro, solicitado por Hamami, Ronaldo abrazó y dio un beso en la mejilla a la mujer, discapacitada con un 85 % de parálisis, como señal de agradecimiento. Un gesto que ha tenido consecuencias inimaginables para el luso.
Según la cadena Sharq Emroz, Cristiano Ronaldo habría sido condenado a 99 latigazos en Irán por sus muecas de afectos a Fátima, consideradas adulterio en el país iraní.
El luso deberá cumplir la condena la próxima vez que viaje a Irán. Al Nassr disputa la Champions asiática tras haber superado la ronda de playoff. Encuadrado en el Grupo E junto al Persépolis iraní, el Al-Duhail catarí y el Istiklol, de Tayikistán, no deberá volver a Irán en esta fase de la competición.
Perdón con arrepentimiento
Sin embargo, si se clasifica para octavos o sigue avanzando en el torneo, no hay que descartar que deba volver a pisar tierras iraníes, lo que podría provocar, en caso de que Cristiano formara parte de la expedición del cuadro saudí, que fuera detenido por las autoridades de aquel país para obligarle a cumplir la condena.
La pena podría ser perdonada por un juez si los hechos no son punibles o los protagonistas muestran arrepentimiento, reseñó el portal Infobae.
La situación de Cristiano dentro del terreno de juego es diferente a la que le envuelve fuera de él. Once goles y seis asistencias. Ese es el bagaje de Cristiano Ronaldo en las ocho jornadas disputadas de la Saudi Pro League esta temporada.
Al Nassr se agarra al portugués para seguir en la pelea por el liderato. Este viernes, ante Al Ahli, rival directo por los primeros puestos, el luso fue decisivo. Y lo fue como más le gusta, rodeado de unas circunstancias y bajo un escenario en el que siempre se crece. Frente un rival de envergadura y con la obligación de ganar para no perder el tren del liderato. Un día clave para Al Nassr. Y ahí siempre aparece el bicho.
“Todavía amo el fútbol. Incluso a mi edad, adoro jugar, marcar goles y ganar partidos. Voy a seguir jugando hasta que mis piernas digan: ‘Cristiano, se ha acabado’. Hasta el momento seguiré jugando y ayudando al equipo”.
Eran las palabras de un Ronaldo feliz que ha encontrado un lugar para seguir haciendo lo que mejor sabe: marcar. “Todavía tengo mucho. Todavía me gusta el fútbol, marcar goles y ganar. Dicen que estoy acabado, pero sigo demostrando que no es verdad”, aseguró.
Atrás quedan esos tiempos en los que la rumorología rodeaba a Cristiano Ronaldo durante su última etapa en el Manchester United. En Arabia no deja de hacer lo que mejor sabe: marcar goles. Ya van 35 en lo que va de año y aún no ha acabado.