En los últimos meses, los insólitos episodios que protagoniza el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, continúan generando especulaciones sobre la salud y el estado mental de quien busca su reelección contra Donald Trump, y alimenta la preocupación dentro del Partido Demócrata.
El más reciente de estos extraños momentos ocurrió el pasado 10 de junio, cuando el mandatario asistió a un concierto en la Casa Blanca en celebración del Juneteenth, y mientras todos bailaban, permaneció inmóvil y sonriendo por unos 30 segundos, reseñó La Tercera.
El video rápidamente se volvió viral, sumándose a la lista de otros hechos similares que se documentaron en meses anteriores.
Por ejemplo, el 20 de mayo, afirmó incorrectamente que Hersh Goldberg-Polin, un rehén de Hamas, estaba presente en la Casa Blanca durante una celebración del Mes de la Herencia Judía Estadounidense.
También, en una entrevista con Yahoo Finance el 14 de mayo, dijo erróneamente que la inflación estaba al 9 % cuando asumió el cargo, cuando en realidad era del 1,4 %.
Otros errores incluyen leer en voz alta una indicación del teleprompter en abril y referirse incorrectamente al presidente egipcio como «el presidente de México» en febrero.
El vicesecretario de Prensa de la Casa Blanca, Andrew Bates, defendió al presidente y acusó a los medios de comunicación de derecha de distorsionar los hechos.
La carrera electoral entre Biden y Trump se perfila cerrada, con encuestas recientes mostrando una diferencia marginal entre ambos candidatos.
John Zogby, fundador de Zogby International, afirmó al diario La Tercera que el apoyo a Biden se debe en gran medida al rechazo hacia Trump, a pesar de la falta de entusiasmo por el actual presidente.
El último sondeo Reuters/Ipsos, un 41 % de la intención de voto va hacia Trump, y 39 % para Biden, mientras que otro 20 % señaló que no eligió un candidato aún.
Este gran porcentaje de electores indecisos podría ser decisivo en los últimos meses de campaña, especialmente con el debate programado para el 27 de junio en CNN.
Con menos de cinco meses para las elecciones, cada detalle y gaffe de los candidatos será crucial en una contienda que promete ser muy reñida.