Nicolás Maduro anunció este lunes un incremento en la remuneración de los trabajadores de la administración pública, al ajustar el Bono de Guerra Económica de 30 dólares a $ 60, representando un aumento del 100 %.
Asimismo, anunció que el pago del bono de alimentación es de 40 dólares, totalizando 100 dólares mensuales para los trabajadores.
Una vez más, el ajuste se hace sin siquiera tomar en cuenta el salario mínimo y solo modificando los bonos que no generan incidencia en pasivos laborales.
Maduro no mencionó los 130 bolívares, equivalentes a $ 3,20 al cambio de la tasa actual del Banco Central de Venezuela, que siguen constituyendo el salario mínimo legal, mediante el cual se definen los tabuladores salariales, primas y demás beneficios consagrados en la ley y contratos colectivos.
Por otro lado, el monto de la cestatique que las empresas privadas están obligadas a paga no experimentó ningún cambio, por lo que el “aumento” solo tendrá repercusión en los trabajadores del sector público, que verán crecer sus ingresos de $ 70 mensuales a $ 100, un incremento de 42,8 %.