La líder opositora venezolana María Corina Machado aspira a una transición democrática razonable que una al país, cuando sea presidenta, dice, lo será de todos los venezolanos “por igual”, sin revancha ni venganza, y todo esto sería conveniente no solo para Venezuela, sino el hemisferio.
“Es indispensable llegar hasta el final, esto no se trata de una competencia electoral convencional”, dijo este domingo en una entrevista con el diario español El Mundo en referencia a los comicios presidenciales de julio próximo.
Durante a entrevista, la líder de la oposición venezolana hizo referencia al propósito de la disidencia para obtener la victoria ante el chavismo: “Hasta el final es reconstruir un país para nuestros hijos y eso es lo que estamos decididos a hacer. Cada día que pasa, vamos creciendo y ellos cayendo”.
“Ahora, yo no me chupo el dedo, estamos enfrentando un sistema criminal que se lo está jugando todo. Si aquí se cuentan los votos como es, nosotros vamos a arrasar, no hay manera de que (los chavistas) puedan alzarse con una victoria”, sentenció.
Machado, que mantiene actualmente copada su agenda con actividades de campaña en distintas ciudades de su país, denunció que la elección de julio “no es libre” y el proceso está “lleno de trampas” porque los venezolanos no van a poder votar a la persona que eligieron en las primarias de la oposición (ella misma).
Y no es justa porque hay 10 millones de personas con derecho a votar a los que se les “niega”, en referencia a los que están fuera del país, no se les ha permitido registrarse para ejercer el sufragio o se encuentran con trabas administrativas que lo dificulta.
Consciente de la situación socioeconómica de Venezuela, reconoce Machado que toca reconstruir un país “hecho añicos”.
“Tenemos más de la mitad del territorio bajo control de grupos armados irregulares, tenemos una Venezuela hipotecada y endeudada, tenemos una crisis humanitaria, una crisis de servicios, una crisis de seguridad -describe. ¡Peor que una guerra! Para lo que a nosotros nos va a tocar reconstruir es necesario que vayamos de la mano”.
María Corina Machado fue electa por una abrumadora mayoría durante las primarias de la oposición celebradas durante el mes de octubre. Pese al rotundo apoyo popular, la líder opositora fue privada de formalizar sus aspiraciones por imposición de una inhabilitación política impuesta por el régimen chavista a través de la Contraloría General de la República.
Debido a los impedimentos, Machado designó a Corina Yoris como su candidata delegada, pero el régimen chavista también limitó su inscripción en la boleta. Finalmente, y tras un proceso de negociaciones, se logró el respaldo de los miembros de la Plataforma Unitaria a favor de Edmundo González Urrutia.