Nicole Eggert, quien reveló el 9 de enero que había sido diagnosticada con cáncer de mama, contó este domingo en una entrevista para People que se arrepiente de operarse los senos para su personaje de Summer Quinn en la serie ‘Baywatch’.
La actriz, de 52 años, buscaba seguridad en sí misma para utilizar los trajes de baño con los que sus demás compañeras, Pamela Anderson, Yasmine Bleeth o Carmen Electra, lucían espectaculares.
«Todas las chicas hacían ejercicio y eran súper pequeñas y estaban en forma y yo estaba como ‘Ups’. Y los trajes de baño de una pieza no eran favorecedores. No quería usarlo en absoluto», dijo Nicole.
Sin embargo, Nicole ahora admite con madurez que no fue lo mejor para deshacer la incomodidad que sentía y sugiere a las jóvenes no hacer lo mismo.
«Miro a todas estas chicas más jóvenes haciéndolo y pienso: ‘¡Dios, dejad vuestros cuerpos en paz!’ Pero cuando tienes que ponerte ese traje de una sola pieza y es tan plano que parece plisado, tienes pliegues en el frente…», continuó.
«Fue una decisión estúpida cuando tenía 18 años», agregó.
Sin estar preparada para tal exposición en un programa de televisión que explotaba su físico, Nicole lidió con varios episodios de fragilidad emocional, que contará en un nuevo documental junto a otras de sus experiencias en la playa.
«Simplemente no era para lo que me inscribí. Era un espectáculo y un juego totalmente diferente y no donde quería estar», explicó.
Ahora, una amiga de Nicole, Mindy Molinary, ha creado una página de GoFundMe en su nombre, donde ha recibido apoyo de algunos compañeros de Hollywood a raíz de su enfermedad.
Según TMZ, Kyle Richards está entre las celebridades que donan a su recaudación de fondos, desembolsando $1.000.
En 2014 se declaró en bancarrota en dos ocasiones, lo que demuestra su situación financiera.