La decisión de la Corte Penal Internacional (CPI) reconfirmada el pasado viernes y que dan paso a la reanudación de las investigaciones contra crímenes de lesa humanidad en Venezuela, representa no solo una molestia para el oficialismo, sino también un obstáculo para sus socios geopolíticos.
Se trata de un «jaque» que podría provocar la potencial ruptura de las relaciones internacionales que aún conserva el Gobierno venezolano, aislándolo aún más a nivel global según el planteamiento que asomo el abogado e internacionalista William Cárdenas, perteneciente al Comité Internacional contra la Impunidad en Venezuela (Ciciven), una ONG que ayuda a consignar ante la Corte más de 800 casos de presuntas violaciones a los DD. HH.
Versión Final tuvo la oportunidad de conversar con el abogado Cárdenas, quien se apersonó el pasado 1 de marzo en La Haya, para conocer a profundidad las repercusiones que podría tener este caso.
La decisión de la CPI es tan rotunda en cuanto al futuro procesamiento penal de los jerarcas del régimen, que abre el camino para que sus apoyos tanto internos como externos reflexionen y decidan si continuarán brindando esos apoyos», explicó.
Cárdenas amplió que «a nivel interno, las Fuerzas Armadas deben preguntarse qué ruta seguir: Si el papel de colaboradores, cómplices o encubridores de algunos de sus miembros o si por el contrario, elementos que mantienen su dignidad dentro de los cuarteles, se pondrán al lado del pueblo venezolano para detener a los criminales cuando los imputen. Y en los apoyos externos puede ocurrir algo similar: o están dispuestos a seguir achicando agua de un barco que se hunde, o si ya dan ese régimen narcotraficante por amortizado y se preparan para los nuevos escenarios abriendo los lógicos contactos y puentes».
Todos estos planteamientos aún se encuentran a la espera de convertirse en una realidad. La CPI apenas decidió reanudar sus investigaciones y no han sido emitidas resoluciones contundentes al respecto. No obstante, según el internacionalista Cárdenas, se trata una cadena de eslabones que tiene por cabeza el presidente de la República, Nicolás Maduro.
En materia de crímenes de lesa humanidad, la Corte Penal Internacional solo investiga, procesa y sanciona a los máximos responsables de un Estado u organización criminal que hayan puesto en marcha una política de estado de ataques sistemáticos o generalizados contra una parte de la población civil, perfectamente identificada, con conocimiento de dichos ataques, en nuestro caso la oposición política y por motivos políticos. Nicolás Maduro es el primer eslabón de esa cadena de mando del Gobierno de Venezuela, que en su condición tanto de Jefe de Estado, como de Comandante en Jefe de las Fuerzas Armadas detenta el máximo poder civil y militar, y es el principal responsable penal de dichos ataques, tanto por acción como por omisión», indicó.
Primera victoria
Aunque aún el proceso es largo, la simple reanudación de las investigaciones por parte de este tribunal de última instancia, consiste ya en una victoria para todos los familiares de los jóvenes caídos en Venezuela, de los presos políticos y desaparecidos, aseguró Cárdenas.
«Ellos han sido la razón y el motivo de nuestra lucha. Ese sacrificio de sangre y dolor de tantos jóvenes tiene que encontrar el canal de la justicia para que los responsables paguen por sus crímenes. Han sido mas de 20 difíciles años pero al final hemos logrado abrir la jurisdicción imparcial e independiente de la máxima Corte Penal Universal», puntualizó.
Para el especialista, el proceso del Gobierno Bolivariano ante la CPI posee «características propias. Cuesta entender cómo desde un país donde no ha habido un terremoto, un tsunami, un cataclismo ni una guerra han salido huyendo 8.5 millones de personas, el 25 % de su población. Pero eso ya lo tienen claro en La Haya, donde lo hemos explicado ampliamente».
Ha sido la actuación de una organización criminal y narcotraficante, que se instaló en los poderes públicos, garantizándose más de 20 años de impunidad, planificando como política de Estado, ataques sistemáticos y generalizados contra una parte de la población, para mantenerse en el poder, con pleno conocimiento de dichos ataques con los que han incurrido en los crímenes de lesa humanidad por los que se les procesará», sentenció.
Para finalizar, William Cárdenas colocó a disposición a la ONG en la que trabaja, para escuchar a todos aquellos que crean haber sido víctimas de crímenes de lesa humanidad en Venezuela y luego presentar sus casos ante la CPI. «En Ciciven estamos preparados para asesorar y recibir los testimonios de víctimas y familiares que comprometan la responsabilidad de los jerarcas del régimen, para al final alcanzar nuestro objetivo que no es otro que la justicia», manifestó.
Versión Final