El defensa del Luton Town, Tom Lockyer, habló este domingo en la previa del encuentro de su equipo ante el Manchester United, sobre lo que fue para él su episodio cardíaco durante un partido de la Premier League el pasado mes de diciembre.
El 16 de diciembre de 2023, en un juego contra el Bournemouth, el galés de 29 años se desplomó en la cancha en el minuto 59, y fue dado de alta después de colocarle un desfibrilador automático implantable.
Antes de comenzar el juego ante los “red devils”, Lockyer comentó que “necesité del desfibrilador para que me resucitara. Muchas gracias a los paramédicos y a los médicos del equipo involucrados, porque sin ellos no estaría yo aquí”.
“Se me paró el corazón durante dos minutos y cuarenta segundos. Sé que literalmente morí. Sufrí un episodio de fibrilación auricular. Consiste en que la parte superior de mi corazón latía cuatro veces más rápido de lo que debía”, declaró el jugador de la selección galesa.
No fue la primera vez que le ocurría algo similar, y es que durante la final del playoff de ascenso a la Premier League ante el Coventry City, el 12 de mayo, tuvo que ser sustituido por un problema parecido.
“Sucedió en mayo pero supe al instante que esta vez era diferente, la última vez me desperté casi como de un sueño y esta vez desperté de la nada», recordó el capitán del Luton Town.
Durante esos momentos de incertidumbre, Lockyer describió la sensación que tuvo al desplomarse en el campo, en donde “no podía hablar, no podía moverme, tratando de entender qué estaba pasando. Mientras eso sucedía, recuerdo que pensé: ‘Podría estar muriéndome aquí’”.
El galés conversó con Christian Eriksen, Daley Blind y Charlie Wyke, jugadores quienes también han pasado por afecciones cardíacas, quienes le aconsejaron tomar su tiempo para procesar lo sucedido.
